Un campesino que en su alacena
Guardaba un queso de nochebuena,
Oyó un ruidito ratoncillesco
Por los contornos de su refresco,
Y pronto, pronto, como hombre listo
Que nadie pesca de desprovisto,
Trájose al gato, para que en vela
Le hiciese al pillo la centinela,
E hízola el gatocon tal suceso,
Que ambos marcharon, ratón y queso.
Gobiernos dignos y timoratos,
Donde haya quesos, no mandéis gatos.
RAFAEL POMBO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario